Si de repente te dieras cuenta de que Dios está parado frente a ti y, además, tocando la música más encantadora, ¿qué harías? Permítanos contarle sobre Sri Sri Radha, quien se encontró haciendo precisamente eso. Ella rompió todas las reglas.

Hay una historia de amor hindú muy contada que tuvo lugar hace más de 5.000 años cuando el Señor Krishna, un avatar del Señor Vishnu, disfrutaba juguetonamente de su juventud mientras pastoreaba vacas con sus amigos en la India. Las gopis, que así llamaban a las pastorcillas, adoraban y amaban al adorable Krishna. Cuando tocaba melodías embriagadoras con su flauta en el bosque, las gopis dejaban lo que estaban haciendo y corrían hacia él. Era simplemente irresistible.

Pero fue Radha, ella misma una encarnación divina de la Diosa Lakshmi, cuyo corazón puro y devoción hacia Krishna se destacaron más. Y con reciprocidad divina, Krishna se dedicó completamente a ella. Mientras Krishna encanta al mundo, Radha encanta incluso a él.

EL AMOR MÁS ALTO

Aunque ya estaba casada, como muchas de las otras gopis, estaba completamente entregada a él con un amor eterno e incondicional. Aquí es donde podríamos decir que las reglas se rompieron oficialmente, es decir, en el plano terrenal. En realidad, en el nivel trascendental, todo fue perfecto.

Su amor tuvo lugar en el plano trascendental donde su devoción interminable simboliza el amor más elevado y puro.

Su amor es tan elevado y piadoso, y no debe confundirse con ningún uso terrenal de la palabra, que todavía son adorados juntos hasta el día de hoy: Sri Sri Radha-Krishna, un solo nombre. Su amor simboliza el nivel más alto de devoción y la importancia de Radha es casi tan importante (si no más según algunos) que la de Krishna, según quienes adoran a Vishnu. Juntos representan los aspectos femenino y masculino de Dios. Ella es la shakti de Krishna, la manifestación femenina de la energía divina.

VERDADERA MEDITACIÓN

Ahora bien, aquí es donde usted debe involucrarse, especialmente si está en una búsqueda espiritual.

El gran regalo de Radha de devoción eterna por su consorte eterno retrata su apertura, entrega, concentración y amor por Krishna. De esta manera atrae a la divinidad misma. Mientras Radha adora a Krishna, él se vuelve devoto de ella. Este amor trascendental simboliza lo que muchos de nosotros buscamos en nuestros esfuerzos espirituales.

Sus cualidades son ideales para experimentar la verdadera meditación, una práctica espiritual importante para los buscadores de la Verdad. Es esta unión de las energías masculina y femenina (el romance divino de Radha) a lo que aspiramos en la meditación.

“La meditación es acercarse a la realidad. Meditar es sentarse y mirar en ti”.
~ Prabhuji

¿Quieres ayuda para ponerte de humor para meditar? Descubre la profundidad dentro de ti mientras quemas cualquiera de las tres fragancias néctaras de nuestro Incienso de Meditación. A cada aroma se le ha dado uno de los nombres de Sri Radha, cuya devoción eterna por su eterno consorte Sri Krishna simboliza la potencia interna de lo Divino. Estos aromas dulces, aterciopelados y florales con matices claramente femeninos han sido diseñados según recetas antiguas para traerte al momento presente, donde la unión con lo Divino puede tener lugar naturalmente en el estado de meditación.

“Meditar es observarse a uno mismo sin la intervención de la mente. Meditar es observarse a uno mismo sin la intervención de lo conocido. Meditar es observarse a uno mismo sin la intervención del pasado”. ~ Prabhuji