Los conos de incienso Palo Santo de Prabhuji's Gifts se fabrican en un taller artesanal en un pueblo rural de los Andes colombianos. Pero hay mucho más en la historia que solo esto. Este taller colombiano se inauguró en colaboración con Prabhuji's Gifts, con sede en Nueva York, en 2014 con dos objetivos en mente:

1. Mejorar la calidad de vida de las personas que luchaban por mantener a sus familias en una comunidad marginada y pobre.
2. Elaborar un producto 100% natural que no se encuentre en ningún otro lugar.

Y esto es exactamente lo que ha sucedido, además de un poquito más de bondad. Bajo la dirección de Prabhuji's Gifts, se instaló el taller e inmediatamente empleó a siete personas, que habían estado sufriendo dificultades financieras.
penurias que, lamentablemente, son típicas de la región. Sin embargo, no fueron los únicos que sintieron los beneficios de este nuevo negocio en la aldea, y también se crearon espontáneamente ingresos secundarios para otros en esta comunidad rural. Pero hablaremos más sobre esta bendición ampliada más adelante.

Las siete personas que trabajan en el taller, donde elaboran a mano una variedad de mezclas de incienso de cono de Palo Santo, son en su mayoría mujeres cuyas oportunidades de empleo anteriores a esto eran estacionales y con mucha mano de obra. Además, cuatro de las mujeres no lograron completar su educación secundaria, lo que redujo sus oportunidades laborales. Anteriormente, el único trabajo que podían encontrar era demasiado exigente físicamente para ellos, como cortar y transportar leña desde las montañas. Sólo para darte una idea, la mayoría de la gente de este pueblo vive en casas de adobe, que son húmedas en verano y frías en invierno.

El taller no sólo les ha asegurado ingresos regulares, sino que también les brinda a las que son madres la flexibilidad que necesitan para cuidar a sus hijos. A los artesanos se les paga según la cantidad de conos que hacen, por lo que para aumentar sus propios ingresos, el taller ideó un nuevo sistema de fabricación manual que ha aumentado los salarios de todos.

Pero ocurre algo más que es igualmente importante. Estos artesanos trabajan juntos en un ambiente espontáneamente jovial y colaborativo, convirtiéndolo en su hogar lejos del hogar y un lugar al que pueden traer a sus hijos. Una mujer que tiene un bebé puede dejar de hacer conos cuando su hijo necesita ser amamantado. Otros tienen niños en la escuela y juegan en el taller después de la escuela.

El trabajo infantil está estrictamente prohibido y el empleado más joven tiene actualmente 21 años.

El taller también emplea a un hombre que nunca tuvo la oportunidad de aprender a leer. Trae madera de la montaña que se utiliza en los conos de incienso, además de leña para calentar el taller y los hornos.

Y ahora llegamos al ingreso secundario que proporciona el taller. Hay una tienda de barrio cerca y ese dueño también tiene una nueva fuente de ingresos ya que el taller compra su café y galletas, una delicia costosa que es parte de su cultura, para los artesanos. El taller también compra localmente arroz, sopa y pan con mermelada, y los artesanos preparan el almuerzo juntos.

También se beneficia de este nuevo taller un vecino que fabrica cestas con el bambú que crece en un bosque local. El taller compra estas cestas de bambú para almacenar los conos antes de enviarlos a Estados Unidos. En los conos también se utiliza bambú del mismo bosque.

La esperanza de Prabhuji's Gifts es que el número de artesanos que trabajan en este taller crezca para que más miembros de esta comunidad marginada tengan la oportunidad de mejorar la calidad de sus vidas.